Albo es una Institución de Tecnología Financiera, que opera bajo la supervisión de las autoridades financieras mexicanas, se trata de una entidad “segura”, aunque cabe recalcar que tus fondos no cuentan con protección alguna en caso de que exista alguna situación, en contraste con otras entidades como los bancos que cuentan con seguros que respaldan el valor.
En el caso de las entidades fintech reguladas, la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) otorgó la autorización para entidades como Albo, que operan bajo la figura de Instituciones de Fondos de Pago Electrónico (IFPE), contempladas en la Ley para Regular Instituciones de Tecnología Financiera, conocida como Ley Fintech.
Durante mayo del 2022 Albo recibió la aprobación de la CNBV, después de que la autoridad verificará que los términos de sus operaciones estuvieran en orden y asi ofrecer servicios que consistieran en la emisión, administración, redención y transmisión de fondos de pago electrónico por medio de aplicaciones, interfaces, páginas de internet o cualquier otro medio de comunicación electrónica o digital.
En otras palabras, Albo se encuentra autorizada para realizar actividades como:
- Abrir cuentas en las que se realicen registros de abonos
- Realizar transferencias de fondos de pago electrónico entre sus Clientes
- Realizar transferencias de determinadas cantidades de dinero en moneda nacional o, sujeto a la previa autorización del Banco de México, en moneda extranjera o de activos virtuales
- Entregar una cantidad de dinero o activos virtuales equivalente a la misma cantidad de fondos de pago electrónico en una cuenta de fondos de pago electrónico, mediante el respectivo cargo en dicha cuenta.
De acuerdo con lo anterior, Albo puede realizar actividades de un monedero electrónico o «e-wallet», aplicaciones o plataformas en línea que permiten a los usuarios almacenar y gestionar sus finanzas. Algunos de los beneficios de los monederos electrónicos son:
Mayor seguridad: almacenar dinero en un monedero electrónico es más seguro que llevarlo en efectivo, ya que hay menos posibilidades de que sea robado o perdido. Además, muchos monederos electrónicos ofrecen opciones de autenticación de dos pasos o autenticación biométrica para proteger las finanzas del usuario.
Mayor conveniencia: los monederos electrónicos permiten a los usuarios realizar transacciones en línea o en persona de manera más rápida y sencilla. No es necesario llevar efectivo o tarjetas de crédito físicas, sino que basta con tener el monedero electrónico en el teléfono móvil.
Mayor control: los monederos electrónicos permiten a los usuarios controlar y supervisar sus finanzas de manera más efectiva, ya que proporcionan un historial detallado de transacciones y permiten establecer límites y presupuestos.
Mayor accesibilidad: los monederos electrónicos están disponibles en línea, por lo que pueden ser utilizados en cualquier lugar donde se tenga acceso a internet. Esto hace que sean especialmente útiles para personas que viajan a menudo o que viven en áreas sin acceso fácil a servicios financieros tradicionales.